3erPolo
Bajo el signo de la confusión...













3erPolo | Resistencia Civil | Rumbo a la Prosperidad | Enlaces





Por Domingo Alberto Rangel M.
















La semana estuvo animada con una discusión tonta: ¿Vale la pena firmar el acuerdo?

La respuesta depende del lado de la mesa en el que se siente el comensal.

Si los intereses coinciden con los de Cesar Gaviria es obvio que el compromiso se debe defender como si se tratara del honor nacional.

En cambio para las partes representadas en la mesa, Gobierno y Coordinadora, nada nuevo brilla bajo el sol.

No es bueno ni malo refrendar lo que ya incluye la Constitución.

En teoría ni el oficialismo podrá brincarse a la torera los referendum de la Bicha ni la CDV podrá apoyar los factores golpistas que tanto daño causaron con el Carmonazo y el paro petrolero.

Por supuesto que si nada de esto ocurre siempre queda el doctor Gaviria a nuestra disposición; personaje al cual propongo que le den por oficio la nacionalidad siendo quien mejor interpreta a la clase política venezolana.

Hasta aquí el comentario porque ya califiqué de tonto eso de halarse las greñas por una firma que quizás sea más inocua que la definición del agua y más de eso no iba a firmar el oficialismo.

Pero, hay cosas más preocupantes.

Cuando se desconoce al mercado

Una de ellas la vimos en el programa mañanero del periodista José Domingo Blanco quien teniendo de invitado a Andrés Velásquez comparaba distintas clases de arepas.

Fue esclarecedor el programa.

Digamos que esclarecedor de por qué la economía anda mal en el país: Si un periodista reputado y un ex candidato a Presidente están tan confundidos... así será la cosa.

Para los que no vieron el programa resumo: Según los amigos Mingo y Velásquez, las arepas se cuartean cuando no se hacen a usando la harina de maíz precocido de la marca más reputada; hasta allí acompaño en el análisis a estos émulos tardíos de "La Perfecta Ama de Casa".

Lo que no dijeron y por eso creo que andan confundidos fue que número uno: La harina reconocida es más cara y segundo que a nadie le ponen una pistola en la cabeza para que compre la harina barata que, obviamente señor Perogrullo, lo más probable es que sea de menor calidad.

Charlataneando jamás comprenderán la economía

!Es el mercado amigos!

Hay productos para cada gusto y el problema no estriba en que "a unos les den dólares y a otros se los nieguen"; no, el problema es que nadie -ni siquiera el Gobierno- tiene derecho a monopolizar las divisas y por supuesto que es lamentable ver un político con altas aspiraciones emulando los charlatanes de las cuñas publicitarias que aconsejan adquirir determinado polvo para lavar "porque los otros no sirven".

¡Eso significa que Velásquez -y Mingo- no entienden la libertad de los mercados!

¡Esperemos que algún día cambien y abandonen las ideas socialistas en las que se basan para decir lo que han dicho el día de las arepas! Pero, como decíamos, hay otras cosas.

Devuélveme "lo mío"

Por ejemplo el señor Presidente, quien como sabemos no pierde oportunidad y es capaz de sacarle punta a una bola de billar, no más, como dicen en México, habían terminado los negociadores de rubricar el Acuerdazo, se lanzó a competir por el "rating" mediante cadena de medios radioeléctricos en la cual prometió devolverle a la gente "lo suyo".

No se trataba sin embargo de una repetición de aquella salida ciertamente chabacana con la cual el primer mandatario mandó "a prepararse" a la primera dama a través de uno de sus primeros "Aló, Presidente".

Nada que ver: El "lo suyo" era otra cosa.

En esta oportunidad Hugo Chávez hablaba de petróleo mientras explicaba que, en la rueda de negocios que se llevaba a cabo en Maracaibo, los pequeños y medianos amigos del proceso obtendrían la buena pro de PDVSA para entrar al selecto grupo de contratistas de la petrolera.

Para los que aún están en la luna aclaro que ese privilegio que suponemos ahora le corresponde a los amigos del proceso, hasta diciembre pasado era monopolizado por los jefes del grupo que ahora se conoce como "Gente del Petróleo".

Valga decir que sin palanca y certificado de sangre uno no podía antes vender ni empanadas en PDVSA.

Ahora la cosa cambió según la óptica del Presidente que promete devolverle al pueblo "lo suyo".

Ojalá y fuese así. La verdad es otra: Si antes para ser contratista de PDVSA había que pasar bajo las horcas caudinas de los jefes meritócratas... ahora las cosas cambian y usted debe meterse la boina roja para "pegar" en la nueva PDVSA.

Por eso a uno no le gusta que engañen a la gente y mucho menos con nuestro lema devolutivo. "Devolver a la gente su petróleo" implica otra cosa.

Por ejemplo la Privatización Popular de PDVSA que desde Resistencia Civil venimos proponiendo como modo de hacer justicia capitalizando a nuestra empobrecida ciudadanía al tiempo que le quitamos a los gobiernos -a este y al que sea- la tentación de devaluar el bolívar y salir ganando cada vez que el Ejecutivo se excede en los gastos.

¡La mitad de las acciones gratis para los venezolanos vivos a la fecha de los cambios legales que se tienen que hacer... y el resto a venderse al mejor postor en una Bolsa seria para amortizar la deuda! Lo demás es demagogia y significa "devolverle nada a nadie"

Así están las cosas.
















3erPolo

ssxxi_banner_el.jpg